Arquitectura empresarial composable, el nuevo concepto que ayudará a las organizaciones en 2023
Por Humberto Ballesteros, Director Comercial de Digibee para América Latina.
Adaptarse rápidamente a los cambios es esencial para la supervivencia de una empresa. Los cimientos sobre los que construimos nuestra infraestructura informática crítica deben ser capaces de moverse con rapidez, eficacia y seguridad para que el negocio sobreviva.
La arquitectura composable (componible), nos proporciona la flexibilidad que necesitamos para enfrentar las tormentas (conocidas y desconocidas) que se avecinan. En lugar de resistirnos al cambio e invertir para estabilizar el statu quo, la componibilidad nos permite abrazar el cambio para poder crecer, e incluso prosperar, a pesar de lo que el mundo nos depare.
Algunas empresas están bien encaminadas, con la arquitectura composable como norma establecida. Otras acaban de iniciar el camino. Es bueno preguntarse en qué punto se encuentra su empresa.
El texto Digibee’s Top 3 Tech Predictions for 2023, se centró en el importante papel que desempeñará la infraestructura composable para ayudar a las empresas a gestionar los cambios a corto y largo plazo. Creo que este concepto será un elemento diferenciador para las empresas en este año, ya que les ayudará a protegerse de las crisis económicas inesperadas, los conflictos mundiales, las pandemias, las crisis energéticas y otras perturbaciones.
David Groombridge, Research Vice President de Gartner, ha dicho que «en tiempos turbulentos, los principios empresariales composables ayudan a las organizaciones a dominar el cambio acelerado, esencial para la resiliencia y el crecimiento empresarial. Sin ellos, las organizaciones modernas corren el riesgo de perder su impulso en el mercado y la fidelidad de sus clientes.»
Las organizaciones que aprovechan una arquitectura composable o de microservicios están destinadas a ganar. De hecho, los analistas de Gartner predijeron que las empresas que aprovechen la componibilidad en 2022 habrán superado a su competencia en un 80% solo en la velocidad de implementación de nuevas funciones.
Otras ventajas adicionales de la arquitectura composable son:
1.- Resiliencia ante el cambio. Incluso con las tecnologías más avanzadas y los algoritmos de IA más precisos, determinar con exactitud lo que nos espera nunca será una ciencia exacta. Aunque analizar y predecir sigue siendo un imperativo empresarial, también debemos estar preparados para adaptarnos rápidamente cuando se produzcan cambios imprevistos.
Con la componibilidad, la empresa aprovecha un modelo de TI modular, que le permite sustituir fácilmente los componentes individuales por tecnología más adecuada para hacer frente a lo que ocurra en el mercado.
Las empresas que dependen de una arquitectura monolítica -en la que los componentes están estrechamente acoplados- son incapaces de diseñar cambios sin afectar a todo el ecosistema. Con un modelo tan rígido, es extremadamente difícil responder a las alteraciones en el momento.
Por ejemplo, debido a problemas en la cadena de suministro global, un minorista debe ajustar continuamente su tienda de comercio electrónico para reflejar los fluctuantes niveles de inventario. Si el minorista es incapaz de realizar estos cambios en tiempo real, la experiencia del cliente se erosiona y el negocio acaba fracasando.
2.- Libertad para explorar y crecer. La infraestructura composable es liberadora, ya que permite a las organizaciones experimentar con nuevas innovaciones para encontrar el ajuste perfecto. Y los expertos están de acuerdo: Gartner predice que, para 2024, el 20% del Global 2000 informarán de un mayor apetito por el riesgo y una mayor resiliencia, atribuidos al rediseño modular del negocio.
Al dejar de estar encadenada a pilas tecnológicas monolíticas, la empresa se vuelve ágil, desafía creencias arraigadas y explora una serie de escenarios que sirven mejor a la empresa. En lugar de invertir importantes recursos simplemente para mantener las luces encendidas, los equipos de TI y desarrollo se liberan para centrarse en la innovación y el futuro.
La empresa ya no está limitada por la tecnología. En lugar de ello, se le faculta para explorar su potencial y trazar su futuro, independientemente de lo que pueda suceder.
3.- Menor costo con mayor rentabilidad. La componibilidad reduce nuestra dependencia de técnicos y desarrolladores con la amplia experiencia necesaria para gestionar un ecosistema monolítico. Esta profundidad de conocimientos ya no supondrá un cuello de botella a la hora de dotarnos de recursos para el cambio. En su lugar, todo el mundo innovará, lo que nos permitirá recurrir a recursos menos experimentados (y menos caros) para hacer el trabajo.
Como resultado, las TI estarán más centralizadas. La mayor responsabilidad recaerá en las líneas de negocio, donde se contratará a técnicos y desarrolladores dedicados a centrarse en requisitos empresariales específicos de la unidad de negocio.
Aunque se prevé que el gasto en TI aumente en 2023, la inversión se centrará en aumentar la eficiencia, agilizar los procesos y aumentar la productividad de los empleados. La componibilidad apoya estos resultados, integrando las capacidades digitales en toda la empresa.
Los clientes de Digibee confían en nuestra eiPaaS de bajo código para apoyar su arquitectura composable, ayudando a conectar sistemas modernos con tecnologías anticuadas y contemporáneas. Su plataforma incluye componentes reutilizables como las cápsulas Digibee para lograr una mayor eficiencia, lo que reduce significativamente el tiempo necesario para desarrollar y desplegar nuevas integraciones para acelerar la innovación.