El fabricante sueco de equipos de telecomunicaciones Ericsson anunció el viernes la supresión de 8,500 puestos de trabajo en todo el mundo como parte de un programa de reducción de costos para enfrentar sus dificultades financieras.
El grupo, que tenía una plantilla de 105,000 empleados en 2022, publicó resultados por debajo de sus expectativas el año pasado, debido a los recortes de gastos de los operadores de los sistemas 5G a causa de la desaceleración económica mundial y de la inflación.
La mayoría de los despidos se realizarán en la primera mitad de 2023 y el resto en 2024, en una aceleración del plan de ahorro de 860 millones de dólares anunciado a fines del año pasado.
“Vemos un potencial de simplificación y de mayor eficiencia en la compañía, sobre todo en materia de costos estructurales”, dijo a la AFP la portavoz del grupo, Jenny Hedelin.
“Desafortunadamente, también habrá que considerar los efectivos. Pensamos que 8.500 puestos se verán afectados”, agregó.
Ericsson registró en 2022 una caída de 39% de sus ganancias netas, que totalizaron 6.200 millones de coronas suecas (unos 560 millones de euros, 590 millones de dólares).