La calificadora Fitch Ratings redujo la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) de BB-” hasta “B+” con una perspectiva negativa, justificado en un “persistente desempeño operativo débil”.
La caída del grado crediticio a un grado especulativo de calidad crediticia pobre o dudosa “limitará sus fuentes de financiamiento de bancos, inversionistas y proveedores“, advirtió la agencia.
Argumentó que la reducción es en grado especulativo, al señalar que no prevé que la producción petrolera crezca, además de que los accidentes recientes ponen en duda su capacidad operativa, aunado a una deuda cada vez mayor.
Fitch también bajó de BB- a B+ la valoración de alrededor de 80 mil millones de dólares de notas internacionales de la petrolera estatal mexicana en circulación.
En su informe, la calificadora consideró que los incendios en activos e infraestructura críticos reflejan preocupaciones relacionadas con la gestión de sus operaciones y la falta de gastos de capital de mantenimiento en sus activos e infraestructura principales.
Asimismo, en un momento en que la petrolera enfrenta una crisis de liquidez, la agencia expuso que el alto servicio de la deuda y la necesidad de que el Gobierno financie flujos de efectivo negativos han sido razones clave para la inversión insuficiente.
Disminuyó a su vez el puntaje de elementos Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG) de la empresa para reflejar el impacto asociado con múltiples accidentes en las plataformas operativas de Pemex desde febrero de 2023.