El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sostuvo que en la investigación sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa hay evidencia de las conversaciones y actividades conjuntas entre grupos del crimen organizado, la Marina, alcaldes, policías e instituciones.
En conferencia de prensa desde la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de la Ciudad de México, Carlos Beristain, explicó que a ocho años de la desaparición forzada de los estudiantes se han consolidado los elementos de prueba tras un trabajo cuidadoso e independiente.
Al respecto, Claudia Paz, integrante del GIEI, precisó que se ha documentado el trasiego de heroína en autobuses desde Iguala a Illinois, en Chicago, lo que ayuda a entender el escenario de lo que ocurrió el 26 y 27 de septiembre de 2014.
Sobre las conversaciones, detalló que estás fueron entre integrantes de Guerreros Unidos con instituciones del Estado como son la Marina, Policías y alcaldes.
“En síntesis hay una relación cercana entre criminales y autoridades. Hay acciones coordinadas entre ellos”, sostuvo.
Sin embargo, confirmaron que en los últimos meses se han presentado diversas rupturas con las autoridades, especialmente con la Fiscalía General de la República (FGR) de Alejandro Gertz Manero por el incumplimiento de lo acordado con el GIEI, entre estas se han colocado a personas que no saben del caso, se cancelaron más de 80 órdenes de aprehensión contra integrantes del ejército, el C4 y autoridades por el Ministerio Público.
“Han pasado 8 años desde los hechos. Y lo que se juega hoy es el derecho a la verdad y el derecho a la justicia. Todo este trabajo es por los familiares y los jóvenes”, condenaron.
Insistieron en que es momento de que las familias tengan certezas y no más especulaciones ni ambigüedades sobre lo que les pasó a sus hijos. Asimismo, solicitaron someter a un análisis y verificación el informe antes de presentarlo: “el bienestar de las familias está en juego”, añadieron.