México aprovecha las oportunidades del nearshoring: Gustavo Tomé Velázquez
/COMUNICAE/ México se posiciona como la tercera economía emergente más importante con grado de inversión
México es la tercera economía emergente más importante con grado de inversión, después de China e India. Esta posición privilegiada ha motivado un interés continuo en los inversionistas para mantenerse presentes en el país. Además, este atractivo se ha visto fortalecido por las oportunidades relevantes de negocio que ofrece la relocalización de cadenas de producción en México, práctica de negocio conocida como nearshoring, afirmó Gustavo Tomé Velázquez, reconocido inversionista inmobiliario.
Credit Suisse, banco líder en gestión de patrimonio y soluciones de inversión a medida, en el marco de su Nearshoring Tracker, hizo mención que al menos desde noviembre pasado se han identificado cinco anuncios de instalaciones de plantas industriales en México con una equivalencia total de mil 100 millones de dólares, de los cuales la mayor parte corresponde al sector automotriz, pero también con una alta tendencia al alza de la industria electrónica.
En tanto, Banorte en su análisis económico califica al nearshoring como un factor que acelera la modernización y los avances tecnológicos, a la vez de ser un catalizador de las exportaciones mexicanas y contribuir al desarrollo de la infraestructura del país.
A decir de Tomé Velázquez, inversionista inmobiliario, la relocalización de las cadenas de suministro, posicionan a México como el principal beneficiado, debido a que ha provocado que el sector inmobiliario industrial se detone gracias a la llegada de alrededor de 100 empresas al territorio nacional. Mediante este modelo, empresas en Estados Unidos han recurrido al talento en México para encontrar desarrolladores de alta gama.
Con base en lo anterior, América Latina ofrece al mercado norteamericano una combinación única de proximidad geográfica y socios con capacidades desarrolladas, que además cuentan con la madurez suficiente para dar servicios de calidad a sus clientes, según lo señalado por la IDC, empresa global de inteligencia de mercado en tecnología.
A sabiendas de estos beneficios, el país ha impulsado e implementado medidas que promueven el nearshoring, como el TMEC que ha sido catalizador para la relocalización de empresas en territorio nacional, ya que facilita el intercambio de bienes y servicios en esta región. Asimismo, el nearshoring representa una oportunidad de negocio para los Fibras, rubro que en sus 12 años de vida ha logrado una enorme revolución en el mercado de valores, ya que la inversión en los sectores industriales y como esto repercute en la demanda de vivienda debido a la necesidad de diferentes tipos de inmuebles.
Estimaciones de la AMPIP (Asociación Mexicana De Parques Industriales Privados, A.C.), al menos dentro del sector inmobiliario industrial, revelan que se tiene una tasa de ocupación del 97% en mercados importantes, especialmente en el norte del país.
De acuerdo con datos de dicha agrupación, dentro del total de inversiones realizadas en México por el nearshoring, es la región donde se localiza Monterrey la que más capta dicha inversión con un 50%. Posteriormente, se encuentra Saltillo, Coahuila, con el 11%, seguido por Yucatán con un 8% y San Luis Potosí con el 6%. Es así como durante el 2022 el nearshoring atrajo cerca de 30 mil millones de dólares de inversión al país.
Por lo que esta práctica de negocio permitirá particularmente a las industrias automotriz, eléctrica e inmobiliaria afrontar los retos económicos que ya se vislumbran para este 2023.
Fuente Comunicae