La Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) ha declarado la activación de la fase 1 de contingencia regional debido a la presencia elevada de partículas PM2.5 en el sureste del Valle de México.
Esta área incluye las alcaldías Iztapalapa, Milpa Alta, Tláhuac, Xochimilco, en la Ciudad de México, y los municipios de Amecameca, Atlautla, Ayapango, Chalco, Cocotitlán, Ecatzingo, Juchitepec, Ozumba, Temamatla, Tenango del Aire, Tepetlixpa, Tlalmanalco y Valle de Chalco Solidaridad.
Según un comunicado emitido por la CAMe, a las 10:00 de la mañana se registró un valor alarmante de 99.5 µg/m³ (microgramos por metro cúbico) de partículas PM2.5 en la estación Santiago Acahualtepec, ubicada en la alcaldía de Iztapalapa, señalando la gravedad de la situación en el Sureste del Valle de México.
La contingencia se atribuye a emisiones extraordinarias generadas durante la madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero, producto de la quema masiva de pirotecnia y fogatas. Estas actividades festivas incrementaron significativamente los niveles de contaminación por partículas en diversas áreas del Valle de México.
Las partículas, explica la CAMe, se acumularon en el aire debido a una combinación de factores, incluyendo un sistema de alta presión en el centro del país que generó estabilidad atmosférica. Además, el viento débil durante la noche y la mañana, junto con la presencia de inversión térmica, contribuyeron a la concentración de partículas en la atmósfera.
A las 10:00 de la mañana, el Índice de Calidad del Aire de la Ciudad de México indicó una calidad del aire clasificada como «muy mala» en la estación Santiago Acahualtepec, marcando una situación crítica en la zona. Simultáneamente, el nivel de riesgo en la Zona Metropolitana del Valle de México fue calificado como «extremadamente alto».
Esta contingencia ambiental implica medidas restrictivas para mitigar los efectos nocivos en la salud de la población. La CAMe ha exhortado a los habitantes de las áreas afectadas a tomar precauciones, como evitar actividades al aire libre, utilizar transporte público en lugar de vehículos particulares, y protegerse con cubrebocas para reducir la inhalación de partículas contaminantes.