El conflicto hereditario de SRS está basado en recuerdos y suposiciones
La Garci-Crespo formó demandas con base en argumentos subjetivos
La Señorita Socorro Romero Sánchez, empresaria de gran éxito en el ramo avícola y porcícola de Tehuacán, perdió la vida a los 93 años, después de luchar con el cáncer de colon que la llevó a la tumba. Pero la previsora mujer dejó todos sus asuntos en orden.
Sin embargo, al tratarse de una mujer millonaria, los que se consideran con derecho a un poco de la herencia. En 2016, la hoy presidente de Morena en Puebla entabló una demanda intestamentaria basada en supuestos y recuerdos convenientes.
En la demanda, la política afirmó que ella vio que su tía no estaba en condiciones de dictar su última voluntad o firmar un testamento. La empresaria SRS falleció en 2009. Y en 2016, a la diputada con licencia, Olga Lucía Romero Garci-Crespo o Mónica Caballero Garci-Crespo, le conviene afirmar un recuerdo semejante.
Y su argumento más fuerte es otro recuerdo. El doctor Ulises González Hernández afirmó que SRS no se encontraba en condiciones físico mentales óptimas para firmar nada, pues él le suministró fuertes dosis de analgésicos.
Una demanda de supuestos y recuerdos es una documento sin pies ni cabeza, débil que se cae a pedazos. Olga Lucía siempre estuvo alejada de su tía SRS. Fue su tía hasta casi una década después de muerta, cuando le convino.